Nada es lo que parece, no lo son sus pláticas ni lo que promete querer. Porque ella ha decidido que nada le esta permitido y pasa el día siendo su propio juez. Puede, cada vez más, escuchar una voz atrás
Casi todo lo que he querido en esta vida se me ha dado. Y ese casi ha sido y sigue siendo más que suficiente. Y siguiendo con la dicha, el primero no pude abrazar a mis papás, a mi hermano,